
Bandera de Córdoba a media asta en el ayuntamiento. En el interior se ha colocado en la capilla ardiente un crespón en la enseña municipal.
El alcalde de Córdoba (PP) ha declarado mediante decreto luto oficial en el municipio desde las tres de la tarde de hoy, hasta la misma hora del día 19. En la correcta justificación del primer edil, “como alcalde de Córdoba Julio Anguita forma parte con mayúsculas de la mejor historia de nuestra Ciudad, la historia de la convivencia en paz, del progreso económico y cultural, de la crítica y el diálogo, de la eficaz gestión, del afán por mejorar y alcanzar la justicia y la igualdad, de la coherencia, la valentía y el coraje por conseguir nuestros sueños y compartirlos con los demás. Por todo ello el pueblo y el Ayuntamiento de Córdoba quiere demostrar su dolor y al mismo tiempo su cariño, respeto y homenaje a Don Julio Anguita González, alcalde de nuestra Ciudad”.
Según se recoge en el decreto las banderas (ha de entenderse que todas, pues no matiza que sea la cordobesa, aunque finalmente solo ha sido ésta) ondearán a media asta durante este periodo y se suspenderán todos los actos oficiales públicos. Igualmente, se señala que en las enseñas de interior (tampoco se matiza, aunque sólo se dispuso en la cordobesa) se colocará un “crespón negro” (con decir crespón es suficiente, pues segun la RAE el crespón singinifica “tela negra que se usa en señal de luto”. Otro debate más servido sobre la conveniencia de aplicar el luto en estos momentos por una personalidad en concreto.

Decreto de la alcaldía por el que sedeclara luto oficial en el municipio de Córdoba.

Julio Anguita, alcalde de Córdoba entre 1979 y 1986, coordinador general de Izquierda Unida entre 1989 y 2000, secretario general del Partido Comunista de España por esos mismos años, falleció a los 78 años. Fue candidadato a la presidencia del Gobierno español en tres ocasiones.

Noticia recogida por Europa Press el pasado 16 de abril
Informe de Protocolo
En este caso, el servicio de protocolo de la presidencia había emitido un informe técnico que por su interés y acierto queremos recoger aquí:
Cuando un Presidente de Aragón fallece está previsto por costumbre los pasos que deben seguirse en relación a los honores que puedan corresponderle.
1. Declaración de luto oficial.
2. Orden de arriar a media asta las banderas de Aragón en el territorio de la Comunidad Autónoma.
3. Comunicación al resto de instituciones autonómicas, provinciales y locales de Aragón.
4. Presencia institucional en los actos funerarios y de homenaje que puedan, en su caso, ser convocados por la familia.
2. Circunstancias.
Ningún reglamento de honores de institución alguna recoge qué debe hacerse ante situaciones tan inesperadas como la que vive ahora nuestra sociedad como consecuencia de la pandemia COVID-19.
Ante circunstancias excepcionales, como es el caso, las decisiones a tomar deben considerarse con mesura y con reflexión, siempre pensando en el mejor fin perseguido. Y, si procede, también ha de optarse por acciones diferentes a las que se pondrían en marcha en una situación normalizada.
3. Consideraciones.
Ninguna decisión ha de ir adelante sin la autorización expresa de la familia.
Los honores ameritan expresarse con la dignidad que merece la persona hacia la que van dirigidos; valorando siempre la oportunidad y las circunstancias que rodean el momento con el fin de lograr comunicar a través de ellos el reconocimiento que la persona tiene de la colectividad a la que pertenece. En este caso, de los aragoneses.
Nadie como quien ha tenido la alta responsabilidad de servir a sus ciudadanos con el máximo honor en su representación (tal es el caso del Presidente de Aragón) comprende mejor lo que debe hacerse para expresar bien su condición de servidor del bien común.
Primero: orden de aplazar el ceremonial que corresponde al fallecimiento del Presidente Santiago Lanzuela hasta el momento en que las circunstancia lo permitan y siempre que se cuente con el visto bueno de la familia.
Segundo: firma de un comunicado oficial de pésame, respeto, solidaridad y reconocimiento por el Presidente de la Comunidad Autónoma.
Tercero: publicación en los medios de comunicación aragoneses de sendas esquelas para expresar el pésame a la familia y amigos.
Cuarto: no decretar luto en la Comunidad Autónoma puesto que, como es sabido, se encuentra en el sentir de todos el dolor por las consecuencias de la pandemia y no procede distinguir ahora a quien, seguro, lo merece en otras circunstancias.
Quinto: cuando proceda en tiempo y forma, y de manera excepcional, expresar oficialmente el luto en el acto que expresamente, también si se tiene el visto bueno de la familia, se convocará.
Sexto: como símbolo de respeto y reconocimiento a la memoria del Presidente Lanzuela, en las dependencias la Presidencia del Gobierno de Aragón (despacho de respeto y acceso) se colocará un crespón en la moharra del mástil; pero no en el resto de los espacios ni en ninguno de los edificios.
Séptimo: en el primer acto de convocatoria pública que convoque el Gobierno de Aragón, se guardará un minuto de silencio en memoria de todas las víctimas de la pandemia y en recuerdo expreso del Presidente Lanzuela”.
