Nuevo protocolo en una comida oficial ofrecida por los Reyes

Mesa presidencial

Presidencia de la comida en Palacio

Un interesante cambio que no debe pasar por alto. Aunque no fue una visita de Estado, sino oficial, nunca se había optado por una solución como las que muestran las fotografías que ilustren esta breve nota. Fue con ocasión de la visita a España del Presidente de Palestina, Mahmoud Abbas, en la que el rey Felipe VI y la reina Letizia ofrecieron un almuerzo en su honor en el Salón de Columnas del Palacio Real de Madrid. Con anterioridad, ambos Jefes de Estado habían mantenido un encuentro en el Palacio de La Zarzuela, en compañía de sus respectivas delegaciones. Un protocolo diferente para el comedor y la mesa principal. Merece la pena recogerlo.

Vista general del salón de la comida en Palacio Real

Se ha optado, en esta ocasión por varios cambios que conviene reseñar:

  1. Se prescinde del comedor de gala y del comedor de diario (el más habitual para estos casos de visitas no de Estado) y se elige el Salón de Columnas, uno de los espacios más bonitos en mi opinión de Palacio, muy apropiado para este tipo de comidas. Al menos da sensación de amplitud y luz, frente al agobiante y oscuro comedor de gala.
  2. La mesa presidencial semiovalada (imperial pequeña) se sitúa en cabecera, frente a un conjunto de mesas redondas. Importante novedad.
  3. El protocolo de la mesa principal se establece en alternancia, lo que permite que los Reyes presidan juntos, a su derecha el invitado de honor y a su izquierda el Presidente del Gobierno. Esto favorece una mejor imagen de los Reyes juntos con su invitado de honor, cosa hasta ahora imposible de conseguir con la mesa imperial única que lleva a que los Reyes se queden uno frente al otro y no puedan salir juntos en la imagen. Además en esta ocasión, haría que el invitado de honor debiera irse por deferencia al lado de la Reina y lejos del Rey.

Este cambio lo saludamos con alegría por el avance que conlleva, aunque con matices que más adelante comentamos, pues supone otro nuevo paso más en la evolución del protocolo de Felipe VI, que aunque mejorable abre expectativas interesante para hacia estas situaciones protocolarias. Y al mismo tiempo nos lleva a la reflexión de la necesaria versatilidad de algunas tradiciones que deben de acomodarse en función de las circunstancias y los casos concretos. Siempre hemos comentado que la mesa de gala de Palacio resulta incómoda para los comensales (excesivamente grande y ancha lo que dificulta un adecuado ambiente de conversación, al tiempo que hace predominar demasiado el factor social, que resta el objetivo de facilitar relaciones en línea con los intereses de Estado). También para los periodistas, por cuanto que los Reyes en la mesa imperial tradicional quedan separados, uno en frente del otro, lo que no permite tomar una imagen adecuada de ambos con sus invitados de honor.

Discurso

Discurso Presidente de Palestina en comida Palacio Real

Imagen fría y distante

No obstante, es necesario afirmar que quizá resulte fría la imagen global del comedor objeto de este análisis, con todos los invitados de la mesa presidencial aparentemente distantes y muy encerrados entre ellos, manteniéndose las mesas secundarias visualmente lejos, trasladando una visión excesivamente jerárquica. Creo que esta opción ganaría si la mesa se centrara en el salón, aunque ello implicaría tener que recurrir a la presidencia francesa, separando de nuevo a los Reyes. Quizá en la opción elegida debiera haberse prescindido de los puestos que dan la espalda al comedor y ganaría mucho. Al fin y al cabo lo importante es que los reyes estén junto al invitado de honor y primeras autoridades. O ya puestos, como alternativa, sería mejor la de poner una mesa presidencial redonda en el centro del Salón para diez o doce comensales y alrededor de la misma el resto de mesas. Al ser un tablero más pequeño, aunque los Reyes se separen, se consigue un mejor formato de conversación, y al ser más pequeño la fotografía de los Reyes y el invitado de honor se garantiza de igual manera.

Se evitaría el vacío central del Salón, pero supongo que sus motivos habría en la comida celebrada y nada al respecto podemos señalar, pero queda un poco chocante. En cualquier caso nos parece una solución que hace pensar si realmente el protocolo tradicional que aún queda en Palacio Real debe ir abriendo puertas a los necesarios ajustes que exigen los tiempos mediáticos actuales. Lo que sí queda claro, es que el Rey trata con la ayuda de su equipo de protocolo y comunicación, dar respuesta diferente a cada caso, porque no siempre el protocolo demanda las mismas soluciones.

De cualquier forma un tema interesante para los expertos en protocolo de comedores en entornos tan oficiales como el de Palacio Real y con invitados de esta altura. El debate queda abierto. Espero vuestras contribuciones.

Más información en: http://www.casareal.es/ES/Actividades/Paginas/actividades_actividades_detalle.aspx?data=13374

Ver video en: https://www.youtube.com/watch?v=QRUvB_FL2E0