Las banderas en El Cortes Inglés, #AsíNo.

Tres buena

Lo de El Cortes Inglés, en relación a las banderas que usa para sus edificios, no tiene nombre, desde el punto de vista protocolario. Y es hora que alguien lo diga públicamente, porque los profesionales siempre ponemos este ejemplo como lo que no se debe hacer. El Corte Inglés es un grupo de distribución de España compuesto por empresas de distintos formatos, siendo el principal el de grandes almacenes.

Ya llevo años comentando que la política que sigue este gran establecimiento, de referencia en España y en Europa, no es la adecuada y que es un desacierto absoluto. Aunque sea una gran empresa, potente, en esto sigue una política equivocada, y, además, sin sentido.

Esta mañana, caminando por la calle Princesa de Madrid, pasé por El Cortés Inglés y de nuevo me fijé en sus banderas. Las habían cambiado, pero para peor. En lo alto de su edificio lucían las enseñas de España. Comunidad de Madrid y la bandera blanquiverde de El Corte Inglés. La ordenación dispuesta por la empresa es España, El Corte Inglés y Comunidad de Madrid. Lamentable y digno de que las autoridades tomen medidas al respecto, porque esta empresa española no puede vulnerar de esta manera la normativa española. No pueden hacer lo que se les antoja, porque “juegan” con símbolos nacionales y regionales, que representan al conjunto nacional, regional y local.

Recomendación hecha por Protocolo del Estado y desde hace años: las banderas comerciales o de empresa deben separarse de las oficiales. Punto importante. Deven separarse porque los símbolos colectivos no pueden ondear con banderas que representan a marcas comerciales. Sin más. Debe ondear la bandera de El Corte Inglés separadamente de las oficiales (y seguramente obtendrá mejores beneficios en cuanto a su visualización).

Lo que es más doloroso es que, aunque se junten todas, la empresa mencionada no puede vulnerar la normativa vigente para las bandera oficiales, aunque sea una empresa privada. Las enseñas de España y la Comunidad de Madrid preceden a la de la empresa. Es decir, tal y como están dispuestas en el edificio de la calle Princesa (y se repite en más centros), en el centro debe estar la de España, a su derecha la de la Comunidad de Madrid y a su izquierda debería ondear la del municipio de Madrid. Y en lugar separado la de la empresa. Pero si se ponen juntas, desde luego la de El Corte Inglés debe ser la última.

Y esta práctica deben seguirla todas las entidades privadas, porque la cuestión es igual para todos.

No se puede hacer un uso comercial de las banderas

Es lamentable que una gran empresa como El Corte Inglés no cuide estos detalles tan sensibles, porque si no atiende a esto tan visible uno duda de que su negocio siga pautas de sensibilidad social. Lo siento por la empresa pero no me ofrece garantías de atender más allá del puro negocio. Muy mal. Fatal. ¿Tanto le cuesta a El Corte Inglés, empresa de referencia en España, cuidar este detalle? Es que no se puede hacer un uso comercial de las banderas oficiales y es lamentable que el Gobierno y los gobiernos correspondientes no persigan estas malas prácticas. Quizá no tenga incomprensiblemente un experto en la materia, alguien que cuide el protocolo, muy necesario –en cualquier caso conveniente- para la entidad. Seguro que tiene grandes expertos en marketing, comunicación, etc…, pero que no se olviden que estas cuestiones que forman parte de las relaciones institucionales pueden terminar minar su reputación. En cualquier caso, que no se olviden que tienen un problema: llevar la expresión “Inglés”. Por eso, deben cuidar la identidad española a través de los símbolos que deseen poner (no están obligados a hacerlo, pero si recurren a ello deben respetar las normas oficiales, las recomendaciones y el sentido común). Una vergüenza para El Corte Inglés que deseamos que subsane en breve.

Señores directivos de la empresa, tómenselo en serio. Juegan con fuego y generan que muchos les critiquen por algo fácil de resolver (y lo hacen en foros influyentes). ¿No tienen a nadie en su plantilla que sepa de protocolo? Si es así, permítanme que les diga que no puedo considerarles una gran empresa, aunque facturen cientos de miles de millones, porque les falta ese equipo de personas que mediante un adecuado un protocolo empresarial aporten la sensibilidad y reputación que convierten en grandes a determinadas empresas. Y en este caos que comentamos comienza por el tratamiento de los símbolos nacionales o regionales.

¿Tanto cuesta hacer las cosas bien y seguir un criterio adecuado? No todo es vender. Y aunque el objetivo sea facturar, no jueguen con los símbolos de los ciudadanos, ni se aprovechen de ellos y, encima, haciendo un mal uso de los mismos. Desde este blog quiero transmitir mi indignación por lo que he visto en este años y que, especialmente, esta mañana en la calle de Princesa de Madrid me ha molestado enormemente. Dado que incumplen las leyes que regulan las enseñas oficiales les anuncio que procederé a presentar la correspondiente denuncia. Es hora ya de dar la batalla por el respeto que merecen nuestros símbolos colectivos (nacionales, autonómicos y locales).

Y ya no hablamos de cómo ordena El Corte Inglés las banderas de países que sitúan en la planta primera, en el caso del local de la calle Princesa de Madrid (y otros muchos centros). De juzgado de guardia. Si no saben, pregunten, asesórense. Pero para considerarse una gran empresa empiecen por cuidar esto que afecta a la identidad de sus clientes.

Escribo esto a título personal porque soy consciente de que nuestras asociaciones profesionales no tienen el coraje de decirles las cosas como son y de denunciarles como merecen. Pero, en mi caso, como técnico cualificado, no me importa para nada decirles que están haciendo un ridículo espantoso y vulnerando las normas oficiales vigentes.

 Corte Inglés